martes, 19 de noviembre de 2013

MANUAL DE POST-PRODUCCIÓN DE AUDIO

Grabación de ambiente en un rodaje 
 
En ocasiones, el encuadre de imagen o el movimiento de los actores o la cámara dificulta la cercanía del micrófono a la acción y por tanto un buen registro de sonido, de modo que se graba después aparte para su post - sincronización en el montaje o la mezcla. También se emplea el wildtrack para dar uniformidad a los fondos sonoros de las distintas tomas de la escena, o con el fin de cubrir tomas para las que no se haya registrado sonido directo.

EFECTOS DE LIBRERÍA
Las colecciones de efectos de sonido previamente grabadas son el recurso más utilizado a la hora de construir la banda sonora de una producción audiovisual. Suelen estar organizadas temáticamente (con categorías tales como: militares, transporte, naturaleza, domésticos, electrónicos, exteriores, humanos, etc.) y cuentan con diversas opciones de indexación para facilitar su búsqueda (por nombres, categorías, elementos relacionados, sinónimos, etc.) que cada vez más se valen de la ayuda de un soporte informático (algunas colecciones incluyen un programa de gestión de bases de datos y una base de datos relativa a los sonidos que componen la colección). Además de poderlos utilizar "tal cual", podemos tomarlos como punto de partida y refinarlos, a base de edición y procesado, hasta que se ajusten a lo que necesitamos exactamente. Los inconvenientes de muchas de estas colecciones son: su precio, ya que para poder ofrecer unos sonidos completamente libres de derechos de autor es necesario pagarlas. Colecciones interesantes son las de CBS, Hanna-Barbera, Lucasfilms, BBC, Valentino, Prosonus, Hollywood Sound Ideas (una parte de la cual está disponible previa solicitud en el IUA), Audivis (tal vez la más asequible en España, pues hasta en los grandes almacenes podemos hallar sus discos), o Network Production Music (tal vez la más extensa: 12000 efectos que ocupan 64 discos). Algunas de dichas colecciones ofrecen un servicio "a la carta", de manera que sólo adquirimos exactamente aquellos sonidos que necesitamos. 


EFECTOS FOLEY.
Ciertos efectos sonoros no se graban en el momento del rodaje bien sea porque el micro se sitúa sólo para grabar el diálogo de los actores o porqué se pierde mucho tiempo de rodaje. Estos efectos se graban luego en estudio y requieren la existencia de un perfecto sincronismo con la imagen: puerta que se abre, pasos sobre un pavimento, galopar de caballos, etc. Para sincronizar estos sonidos con la imagen se
procede como en el doblaje, es decir simultáneamente a la proyección de un fragmento de película, un técnico especialista se sonido reproduce los efectos precisos en momento que corresponde. Estos efectos se llaman efectos de sala o efectos Foley en honor a George Foley un pionero del cine sonoro.

EFECTOS ELECTRÓNICOS O SINTÉTICOS.
Podemos considerar que la película Dr Jeckyll & Mr. Hyde de Reuben Mamoulian (1937) fue la pionera en el uso de dichos efectos (se utilizaron técnicas desarrolladas por Fischinger que consistían en la manipulación de la pista óptica de la película - pintándola a mano, por ejemplo-). Ya en los años 50 algunos creadores de Efectos de sonido se construían máquinas especiales para generar determinados tipos de efectos (como la Foster Gun, que generaba sonidos de pistolas, cañonazos, explosiones. No obstante, habrá que esperar hasta los años 70 para que los sintetizadores y otros dispositivos electrónicos se conviertan en una herramienta importante en la creación de efectos de sonido. Aparte del uso del sintetizador, es muy importante la adopción del sampler como herramienta universal de edición, combinación, procesado y colocación "en vivo" de efectos, así como el uso de los diferentes procesadores de dinámica, tiempo y ecualización.

Los efectos sonoros también podemos subdividirlos según su función en una producción audiovisual, distinguimos entre:




Sonidos objetivos: aquellos que suenan a consecuencia de la aparición de la imagen de un objeto que emite el sonido. Un sonido objetivo suena como se supone que sonará el objeto que aparece en la imagen (no necesariamente suena exactamente como lo hace en la realidad).
Sonidos subjetivos: aquellos que apoyan una situación anímica o emocional de la trama o de los personajes, sin que necesariamente el objeto productor del sonido aparezca en la imagen.
Sonidos descriptivos: aquellos que no representan a ningún objeto de los que aparecen en la imagen, sino que son abstracciones o idealizaciones de los sonidos supuestamente originales (aquellos que podríamos escuchar). Podemos considerarlos como sonidos metafóricos.